A media tarde nos hemos juntado en el Club de Tiro unos cuantos socios más familiares y amigos; comenzando la tarde con una visita guiada de la mano de Marcelo, quién nos ha ido enseñando las instalaciones: galerías de tiro, gimnasio, pistas, piscinas, barbacoas, zonas verdes...

La visita ha concluido en el pabellón de tiro con arco ya que ahí nos iban a enseñar está ancestral práctica. Por una parte, las benjaminas han disfrutado de lo lindo tirando no una...ni dos... ni tres... sino ¡hasta 7 veces! ¡bien por ellas!. Con este tipo de arco igualmente han disfrutado señoritas, señoras y demás féminas incluyendo algún joven caballero. Agradecer a los arqueros que con paciencia y pasión nos han ayudado y enseñado.

Por otra parte, Eduardo nos ha preparado un precioso arco de madera "para chicos"... bueno, más o menos... porque algunas "se les han colado" :-). Marcelo es quien ha dirigido este rato con igual paciencia y pasión que sus compañeros...¡muchas gracias, vos sos un grande! ;-)

A continuación nos ha tocado a nosotros trabajar y hemos comenzado con una charla para nuestros amigos los arqueros. Eduardo y Alberto han estado a la altura de las circunstancias con su sencillez a la par que rigor, un rato entretenido al tiempo que didáctico.

Luego, todos hemos compartido un chocolate calentito con churros mientras realizábamos la observación de la Luna, nebulosa y estrellas. Aquí agradecer a todos aquellos que con su telescopio, explicación, conversación y/o compañía han hecho posible tan agradable rato.

El encuentro ha finalizado en torno a una mesa, con bocadillos y bebidas, cansados pero muy satisfechos, orgullosos y con muy buen sabor de boca... ¡ah! y con un sorteo de unas clases de tiro al arco cuyo afortunado ha sido Luis, el nieto de Manolo, gracias a la inocente mano de Isabel y por cortesía y amabilidad del Club de Tiro.